La patronal del Laboratorio Rivero les debe casi 6 salarios a sus trabajadores, según informó a Orientación un operario cuyo nombre no podemos compartir para preservar su trabajo, ya que, cuando protestaron dentro de la empresa con bombos, fueron despedidos dos trabajadores, con la complicidad de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina, presidida por Héctor Daer, uno de los tres hombres que maneja actualmente la CGT. Además, el sindicato les recomienda no luchar, mostrando cómo la burocracia convierte a la mayoría de los sindicatos peronistas en aliados incondicionales de la patronal, en lugar de ocuparse de la defensa de sus afiliados.
Los obreros de esta empresa, según dijo nuestro entrevistado, están cobrando alrededor de 40 mil pesos por semana, por lo tanto, les deben millones de pesos actualmente. En un principio les pagaban alrededor de un 20% o 25% menos del sueldo, hasta llegar a esta situación; tampoco cobraron los dos aguinaldos del año pasado ni tampoco el de julio del corriente año. Recién en octubre cobraron el salario correspondiente a abril. Este conflicto se incrementó a partir de enero de este año.
A todos les están pagando lo mismo, desde los puestos más altos hasta los operarios, con deudas desde 1,5 millones hasta de 8 millones. Esto ha conseguido una unión entre los diferentes sectores de los trabajadores (desde los operarios hasta los gerentes y jefes de planta de personal), quienes tienen un enemigo en común: la burguesía.
El obrero aseguró: “Es la primera vez que están de nuestro lado. A veces van con el dueño y le piden que le paguen más a la gente”.
“Vos entrás, te ponés la ropa de laburo y andás por cualquier lado”, afirmó el operario, haciendo alusión a que el Laboratorio Rivero no cuenta con ninguna medida especial de higiene. Además, habló sobre la mala comida que reciben, lo cual sucedía, incluso, cuando cobraban en tiempo y forma; también nos comentó sobre la lucha que dieron por las mejoras en las condiciones de trabajo, logrando que pongan aires acondicionados.
La excusa de la empresa es que se paga con la plata que entra por día de venta y que ésta no alcanza. Rivero exporta a Cuba, Tailandia, entre otros países, también le vende al gobierno de CABA y a obras sociales, demostrando que a las grandes empresas les importa poco y nada la vida de la clase obrera y, por lo tanto, explota lo más posible con tal de aumentar sus propias ganancias.
“Yo tuve que vender el auto, sino sacaba a los chicos de la escuela y dejaba de pagar el alquiler y me volvía a lo de mis viejos”.Muchos de sus compañeros sí tuvieron que dejar de pagar el alquiler y volver a la casa de sus padres. Algunos, incluso, fueron desalojados. Otros se encuentran con licencia psiquiátrica y tuvieron que conseguir otros trabajos, pero se reúsan a renunciar al laboratorio por todo lo que les deben. Otros a punto de jubilarse que, por el mismo motivo, tampoco renuncian. Mientras que los mayores de 50 años se encuentran sin la posibilidad de acceder a otro trabajo por su edad.
La comisión interna del Laboratorio está en audiencia cada 15 días con el Ministerio de Trabajo, en octubre la empresa y el sindicato acordaron que las prepagas que compran productos a Rivero, pagarían los mismos por adelantado y con ese ingreso se pagaría a los obreros, pero eso sólo puede cubrir el sueldo actual y no los adeudados.
La empresa tampoco está derivando los aportes a las obras sociales, por lo cual muchos de los trabajadores que contaban con esta prestación privada tuvieron que cambiarla por la del sindicato. Según se informó a Orientación, la empresa siempre evitó pagar cargas sociales, incluso desde mucho antes de comenzar a adeudar los sueldos, y cuando los trabajadores estaban próximos a jubilarse, pagaban en moratoria. Por otra parte, la empresa no está pagando la ART.
Actualmente el Laboratorio funciona en tres turnos y trabajan 450 obreros, y en lo que va del año 25 obreros fueron despedidos.