Camarada, vemos que en este movimiento en defensa de la reconstrucción revolucionaria del PCB vuelven a retomar la consigna de “reconstrucción”. ¿En qué consistió la primera Reconstrucción Revolucionaria?
En realidad, podemos decir que vivimos un solo proceso de Reconstrucción Revolucionaria, en varios momentos diferentes. Desde 1992, cuando varios militantes lograron impedir que el PCB intentara disolverse, ya se utilizaba la expresión “Reconstrucción Revolucionaria”, es principalmente a partir de 2005 que este término adquiere un contenido político estratégico: es en nuestro XIII Congreso que los comunistas brasileños hacen la autocritica de la teoría de la “revolución por etapas” y afirman el marxismo-leninismo y la revolución socialista como estrategia para Brasil. En varios momentos esta política de Reconstrucción Revolucionaria dio grandes frutos, pero especialmente desde 2016 con el golpe de estado en Brasil y el cambio de situación de un gobierno de conciliación de clases a un gobierno de extrema derecha, una parte importante del CC de el PCB comenzó a “relativizar” estos principios estratégicos y a retroceder en los avances políticos que habíamos logrado con una línea claramente revolucionaria. La propuesta del CC del PCB para el XVI Congreso era que el PCB afirma que estaba “superando” la etapa de Reconstrucción Revolucionaria y esta propuesta fue derrotada: el XVI Congreso afirmó que estábamos viviendo la “profundización” de esta etapa. No podemos, por tanto, separar este nuevo momento, en el que la Reconstrucción Revolucionaria es abrazada por varios militantes en todo Brasil y el deseo político de realizar un giro a la derecha del CC del PCB provoca la escisión de nuestro Partido, con el proceso que Comienza en 1992. Hay continuidad, con retrocesos y avances.
Es de público conocimiento la expulsión por parte del CC del PCB a varios cuadros y militantes en general, ¿a qué se debe esta práctica expulsiva?
La realidad es que la mayoría del CC del PCB tenía intereses distintos a los aprobados en nuestro XVI Congreso, celebrado en 2021. Desde aquel Congreso, han sido innumerables los intentos de distorsionar la línea política aprobada, en diversos aspectos -desde la relación con la juventud, la posición frente al gobierno burgués de Lula-Alckmin, la posición en la escena internacional y la cuestión de la guerra en Ucrania. Cuando estas prácticas comenzaron a ser denunciadas internamente, comenzaron a realizarse diversas persecuciones y hostigamientos para “callar” a quienes disentían de la CC (es decir, quienes defendían el XVI Congreso). La situación se agudizó con la flagrante violación del Secretario General y del Secretario de Relaciones Internacionales cuando respaldaron, en contra del CC, la participación en la Plataforma Mundial Antiimperialista, un foro internacional que busca acercar a los Partidos Comunistas y otros organizaciones del movimiento de trabajadores para apoyar a la burguesía rusa en la actual guerra en curso. Esta participación, sobre todo después de que fuera suspendida por el CC, pero continuada por el Secretario de RRII, fue el detonante de la crisis al ser denunciada públicamente por el compañero Iván Pinheiro, Secretario General del PCB hasta 2016. Cuando todo el Partido tomó conciencia de estas violaciones, que se llevaron a cabo sin información transmitida a los militantes, comenzó a haber una fuerte agitación por la celebración de un Congreso Extraordinario. La mayoría del CC del PCB, que tenía un compromiso ideológico con el giro derechista en nuestra política, decidió que no toleraría esta divergencia y comenzó una serie de verdaderas purgas para limpiar al Partido de defensores del proceso de Reconstrucción Revolucionaria.
¿Cuáles son las principales diferencias entre el PCB-CC y el PCB-RR?
Hoy todavía estamos en el proceso de discutir estas diferencias. En términos generales, el viejo PCB que estaba bajo la dirección del CC flaquea en la formación de un partido revolucionario, marxista-leninista e internacionalista en lo que respecta fundamentalmente a la postura de independencia de clase, a la política propiamente proletaria. Los compañeros comprometidos con el proceso de Reconstrucción Revolucionaria, que hoy se organizan junto al PCB-RR, en general, apuntan a una política revolucionaria que tiene como punto central la independencia de la clase trabajadora de otras clases y la construcción de un proceso de la Revolución Socialista en Brasil sin ver ninguna fase intermedia de “reconstrucción nacional” previa. Hemos preparado un breve artículo, traducido al español y a otros idiomas, que intenta desmenuzar algunas de las violaciones del CC por parte del PCB a las decisiones del XVI Congreso, que consideramos legítimas, aunque contradictorias en varios puntos. https://emdefesadocomunismo.com.br/como-o-comite-central-do-pcb-viola-as-resolucoes-do-xvi-congresso/
Hace unos días se conoció el calendario de la convocatoria al XVII CONGRESO Extraordinario, ¿qué perspectivas tienen para el Congreso y post Congreso?
Entendemos que este Congreso tiene un papel central en la reorganización del movimiento comunista en Brasil. Podemos, sin los obstáculos del período anterior, en el que el oportunismo y el revisionismo crecieron dentro de nuestras filas, profundizar efectivamente la Reconstrucción Revolucionaria del PCB. Esto requerirá que enfrentemos autocríticamente el legado de todo el movimiento comunista en Brasil y en el mundo, y planteemos la perspectiva de construir un partido verdaderamente proletario, desde su línea hasta su composición social, encaminado a organizar la Revolución Socialista en Brasil. Consolidar la política, que ya venía organizando la UJC, de “giro obrero-popular” es una de las necesidades para que abandonemos, de una vez por todas, la línea de remolque a la socialdemocracia que marcó el período desde entonces. 2016 en nuestro Partido, tendiendo la mano al movimiento obrero, sindical y popular por la reorganización de la clase trabajadora en Brasil. Además, retomar los vínculos internacionalistas que se perdieron debido a los boicots del CC del PCB a la línea del Congreso y construir un bloque revolucionario dentro del Movimiento Comunista Internacional.
Estos acontecimientos se vienen repitiendo en el Movimiento Comunista Internacional en varios países, ¿cómo analizan ustedes la situación del Movimiento Comunista Internacional, tanto en la región como a nivel mundial?
Lo que ha quedado cada vez más claro en nuestros análisis preliminares es que el Movimiento Comunista Internacional se encuentra en un momento de gran desintegración. Los principales intentos de unidad entre los comunistas de todo el mundo, como la Reunión Internacional de Partidos Comunistas y Obreros, han alcanzado grandes niveles de tensión interna, basados en las perspectivas estratégicas e ideológicas que hoy dividen a los PC en torno a los temas más significativos: el apoyo para los gobiernos en el capitalismo, la revolución por etapas, el remolque de la burguesía y la pequeña burguesía y la visión del imperialismo. Sobre todo, esto último, en cuanto a la distinta lectura del imperialismo que hacen los Partidos Comunistas, ha adquirido gran peso en el actual escenario bélico, en el que algunos Partidos, abandonando el internacionalismo proletario y dejándose llevar por el oportunismo, pasan a apoyar a uno de las partes de la disputa imperialista que es el meollo del asunto en Ucrania; por otro lado, los Partidos Comunistas que han establecido sus posiciones internacionalistas han denunciado la guerra imperialista como un episodio más de las diversas disputas por lugares privilegiados en el sistema imperialista global. En América Latina, el ciclo de los llamados “gobiernos progresistas” impactó aún más fuertemente a los partidos comunistas, y algunos llegaron al borde de la disolución en el gran campo político del reformismo. En este sentido, entendemos que es natural que las disputas entre estas líneas políticas ocurran dentro de los Partidos y damos todo nuestro apoyo a los militantes, a nivel global, que buscan afirmar una línea revolucionaria, marxista-leninista en sus Partidos. Lamentablemente, hay organizaciones que hace tiempo que degeneraron sus visiones ideológicas, estratégicas e incluso organizativas, con el abandono del centralismo democrático. Esto ha llevado a la burocratización en diversas experiencias y a purgas y persecuciones dentro de los propios PC. El resultado ha sido el surgimiento de nuevas y poderosas organizaciones comunistas con puntos de vista ideológicos más avanzados, capaces de reclamar el legado del movimiento comunista del siglo XX sin el “ patrioterismo partidista” y avanzar hacia una verdadera autocrítica estratégica.