No hay plata para los jubilados, pero sí para la casta

El gobierno de Javier Milei sigue con su ofensiva patronal contra todos los sectores del pueblo argentino: los trabajadores, los desocupados, los jubilados, los estudiantes, entre otros. Una de las medidas que ha tomado estos días ha sido, además de reprimir la movilización de los jubilados, vetar la reforma jubilatoria que ofrecía una pequeña mejora a los jubilados en medio de esta profunda crisis económica. Al mismo tiempo que veta la reforma, elimina cientos de remedios que tenían descuento del 100% o del 70%, obligando a los jubilados a pagar el doble o el triple por los medicamentos que consumían anteriormente, mientras reciben una jubilación mínima de $234.000, rozando la indigencia.

Nuestros jubilados son los trabajadores que han dedicado toda su vida al trabajo, y hoy el gobierno de los monopolios pretende arrebatarles incluso los remedios. Sabemos que a un jubilado que cobra la mínima no le alcanza ni para cubrir las cuatro comidas diarias, y debe elegir entre comer al levantarse o al acostarse.

Mientras nuestros jubilados viven esta situación paupérrima a causa de las medidas del gobierno actual y las anteriores administraciones capitalistas, el Poder Ejecutivo se encarga de enviar aviones y ayuda “humanitaria” a Ucrania. Mientras tanto, nuestros abuelos viven en la indigencia, y la casta política que tanto criticaba el presidente se autoaumenta el sueldo a 9.000.000 de pesos por mes. Sin duda, al gobierno la única clase que le interesa favorecer es la clase capitalista y la casta política berreta que tenemos en nuestro país.

El gobierno de Javier Milei y Victoria Villarruel está llevando a cabo una masacre social contra todo el pueblo argentino. Los jubilados han dado un ejemplo en la última jornada de lucha y confrontación en las calles. Debemos tomar como ejemplo a los jubilados, su valentía y combatividad, y unir las distintas luchas del proletariado y del pueblo argentino, que hoy están dispersas, para enfrentar la ofensiva patronal de Milei. Es urgente derribar el Plan Motosierra, y sólo con la unidad de todos los sectores en lucha lo lograremos.

El Partido Comunista Argentino repudia el veto, aunque sostiene que esa reforma era totalmente insuficiente para nuestros jubilados. La decisión política de vetar incluso una reforma mínima demuestra el carácter antiobrero y antipopular del gobierno nacional. Al mismo tiempo, nos solidarizamos con los jubilados en lucha y con todos los afectados por las medidas de Milei y su pandilla de usureros y ajustadores, y llamamos a todos los sectores de la clase a seguir profundizando la confrontación con el gobierno, en las calles y con los métodos históricos de nuestra clase.