En el día de hoy, el Partido Comunista Argentino lanza su septuagésima novena Campaña Financiera, en un contexto de agudización de la lucha de clases a nivel mundial, donde sigue en curso la guerra imperialista en Europa, donde la guerra comercial entre las dos potencias imperialistas —EE.UU. y China— por la primacía de la pirámide imperialista afecta enormemente a los trabajadores del mundo, donde la posibilidad de una guerra generalizada para el reparto del mundo está en puerta con las agresiones imperialistas entre Israel e Irán. A la vez, en Argentina, el gobierno antiobrero y antipopular de Milei avanza sin piedad contra la clase obrera y el pueblo argentino, con licuación de los salarios, una inflación que no quieren admitir y un plan represivo que pretende aleccionar a los luchadores y, por ende, a todo el pueblo.
El Partido Comunista Argentino ha participado activamente de distintas luchas que se dieron y dan en el ámbito de la política nacional, como en el movimiento obrero y el movimiento estudiantil. Sus células desplegadas en distintos puntos del país son verdaderas organizaciones de base que planifican y despliegan la agitación y la propaganda revolucionaria en el movimiento de masas donde actúan, y hacen los esfuerzos necesarios para organizar a la clase obrera y al pueblo. A la vez, el Partido hace grandes esfuerzos en coordinar las luchas que se dan en los lugares donde estamos, para no caer en la dispersión, lo cual, lamentablemente, es un panorama real hoy en día. El Partido día a día lucha por unir a la clase obrera para construir una oposición obrera al Plan Motosierra.
El Partido Comunista Argentino, al ser un partido obrero, tiene una composición social principalmente de trabajadores, y como los objetivos estratégicos de nuestro Partido son el derrocamiento de la burguesía y la toma del poder por parte de la clase explotada, no recibimos financiamiento de ningún monopolio, ni del Estado, ni de ninguna institución de la burguesía. Por el contrario, los partidos patronales nutren sus cajas de los explotadores, de los grandes monopolios y del Estado.
Nuestro Partido se financia con los aportes de los trabajadores, estudiantes, vecinos de los barrios, profesionales, pequeños comerciantes y toda persona del pueblo que deposite su confianza en SU Partido.
Las finanzas revolucionarias son utilizadas para el funcionamiento orgánico, el despliegue de las fuerzas del Partido, para la construcción en los movimientos de masas, para su agitación y propaganda, para sus tareas políticas, entre tantas otras cosas.
Hoy la Argentina necesita un Partido Comunista fuerte, dotado de la ideología marxista-leninista, que no arroje las históricas banderas para ser furgón de cola de proyectos antagónicos a los de nuestra clase. Necesitamos un Partido Comunista de combate, fuerte, revolucionario, con vocación de poder, que cumpla su rol de Estado Mayor.
Por eso, la 79.ª Campaña Financiera irá en ese sentido, porque para construir un Partido Comunista como el que necesita la clase obrera y el pueblo, es necesario el aporte económico para que cumpla sus objetivos.